Actualmente comer el arroz o huevo frito en los hogares nacionales se ha convertido en un lujo sin precedentes, y nadie dice nada en este río revuelto donde las empresas mayoristas o importadores de los productos tienen agarrado hasta el cuello a la población.
La variación de precios de los productos es otra triste realidad, cada día el kilo de chícharo, la cebolla o el aceite suben de precios y ninguna entidad sale al paso para regular los precios de los productos. Desde hace meses la bandeja de huevos costaba entre 2.000 o 1.500 ahora el precio se posiciona ente 4.500 y 5.000 XAF, el saco de arroz mediano ha variado de 8.000 XAF,11.000 y ahora ni siquiera está el producto en cuestión en el mercado y antes de que se agote ya oscilaba entre 15.000 y 17.000 XAF. El saco más grande de arroz perfumado hace tiempo que se convirtió en guarnición de gente rica y su precio se acarreó entre 25.000 y 27.000 XAF, una auténtica barbaridad.
Por ahora, sólo el pan mantiene su precio pero tampoco hay que presumirse tanto porque en cualquier momento la realidad puede ser diferente. La metamorfosis de los precios en los productos de primera necesidad en Guinea Ecuatorial también arrasa en otros productos como la leche o los refrescos más consumibles por la población.
Se acercan las fiestas de Navidad y Año Nuevo y la preocupación de la población Ecuatoguineana es notable con la triste realidad de la escasez y el alza de los productos.
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