Días después de iniciar con las investigaciones sobre el arroz de mala calidad importado al país por Martínez Hermanos y EGTC, “Se ha decidido destruir todo este arroz inmediatamente, la urgente revisión de la ley reguladora de actividades comerciales en el país que impondrá las calidades de productos de consumo que deberán entrar en Guinea Ecuatorial; y, por último, sacar el beneficio de “Levante Directo” a las empresas de comercialización de comestibles”, ha manifestado Nguema Obiang Mangue en su cuenta de X, antiguo Twitter.
En la misma reunión mantenida este lunes 2 de septiembre en Malabo, se ha decidido que, a partir de ahora, todos los productos que llegan a nuestros puertos pasarán por un circuito riguroso de control antes de distribuirlos a los mercados nacionales. Y para que estas actuaciones no se repitan en el futuro, las empresas pagarán las sanciones correspondientes según dictaminen las leyes de los departamentos competentes.
Otra medida que ha tomado el vicepresidente después de la reunión ha sido autorizar la inmediata compra de arroz en la república de Serbia, país con el que Guinea Ecuatorial ya mantiene buenos lazos de gestión y compra de alimentos desde el año 2022.
Según el reporte del gabinete de prensa de la vicepresidencia de la República, refleja que, de acuerdo con el informe se concluye que el arroz no es apto para el consumo humano tras el minucioso examen organoléptico llevado a cabo por la comisión. Además, reflejan que el documento leído por el Ministro de Estado de Seguridad, Nicolás Obama NCHAMA, revela que “no hubo un exhaustivo control en los puertos antes de la distribución de este producto en los puntos de venta”.
La comisión ha concluido que las empresas Martínez Hermanos y EGTC incumplieron el artículo 21 de la ley número 7/2002 de fecha 1 de noviembre por la que se regula los servicios veterinarios en Guinea Ecuatorial, al no informar al Gobierno sobre los primeros indicios de incriminación del arroz en cuestión. En consecuencia, deberán asumir las responsabilidades civiles y penales correspondientes.
Y para reforzar las medidas de control de los productos comestibles que entran al país, por un lado, se ha ordenado por un lado una investigación más profunda para identificar quiénes autorizaron el levante directo de este lote de arroz sin la previa intervención de las autoridades de control de calidad de los alimentos. Por otro, conocer a los inspectores de los almacenes y supermercados que no informaron sobre esta anomalía.
La cosa no última en la destrucción del arroz, Nguema Obiang Mangue ha dicho que las empresas también deberán devolver el dinero a los clientes que ya habían adquirido este artículo de primera necesidad previa presentación de sus correspondientes facturas. Y en caso de un malestar para quienes lo hayan consumido, las empresas sufragarán sus gastos hospitalarios.
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