Este viernes 6 de diciembre de 2024, Guinea Ecuatorial ha lanzado su nueva Ley Tributaria, “Un hito fundamental en el desarrollo y la modernización de nuestro sistema tributario, decía el Primer Ministro, Manuel Osa Nsue en la conferencia de prensa de presentación del documento jurídico.
La publicación y entrada en vigor de la Ley Tributaria de Guinea Ecuatorial se ha hecho con la invitación a los hombres de negocios y representantes del sector económico nacional, al considerar como una herramienta clave de gran trascendencia. La ley que se venía utilizando data desde el año 2004, por lo que, con la evolución y desarrollo del país, ya no se adapta a la realidad actual.
La nueva Ley Tributaria llega en un momento de recesión económica tanto nacional como internacional, una realidad que ha obligado al gobierno a reducir sustancialmente los impuestos con el fin de seguir estimulando el ahorro y la inversión, mejorar los niveles de producción de bienes y servicios y reducir el desempleo.
El impuesto sobre la renta de las personas físicas con un tipo impositivo marginal pasa del 35% al 25%. Se amplía el mínimo exento que pasa de 1millón XFA a 1000 0000 XFA. En el impuesto de sociedades, la tasa impositiva actual es del 35% reduciéndose en 25%. “
“El objetivo es que todos los funcionarios contribuyan en proporción a los recursos que disponen. Esperamos que aportará mayor bienestar a la población”, dijo el ministro de Hacienda, Ivan Bakale.
En lo que respecta a los autónomos, propietarios de los pequeños negocios, los patentes se reducen entre un 30% y un 80%, dependiendo del volumen de negocio de cada establecimiento y de su lugar de ubicación.
El primer ministro señaló que la equidad debe ser vertical y horizontal, donde aquellos con mayores ingresos y riqueza, deben contribuir más en proporción de sus ingresos, y que las personas con una misma capacidad de pago, paguen contribuciones similares. “La equidad es justicia social”.
Osa Nsue subrayó que la política fiscal está al servicio de objetivos económicos y sociales, por lo que, debe primar el bienestar general. Y como parte de esa política, la tributación es un mecanismo para garantizar la viabilidad del gasto público, la distribución equitativa de los ingresos y la asignación eficiente de los recursos de la nación, estos elementos deben estar en sintonía con la estabilidad económica y el adecuado desempleo de la actividad productiva.
A partir de la fecha los ciudadanos pueden adquirir este documento en la presidencia del Gobierno.
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