Los años 2008, 2011 y 2012 serán in olvidados por los habitantes de Guinea Ecuatorial y el mundo, pese al paso del tiempo y las circunstancias que adolecen al futbol femenino nacional. En estas fechas siempre nos acordaremos de cuando la selección Nzalang Femenino alzó dos veces en el estadio de Malabo, las Copas de África de Naciones y participó en la Copa del Mundo en Alemania. Sin embargo, es evidente el trato más que inferior que está recibiendo de las autoridades deportivas, respecto al combinado masculino.
El fútbol femenino ganó terreno hace un par de años en el país y cada vez había más aficionados que seguían de cerca este deporte. Además, no solo se trata de una disciplina que genera pasión y emoción, sino que también puede ser una excelente opción para luchar con la igualdad de género y de oportunidades.
Las mujeres futbolistas de nuestro país han luchado por la igualdad de género en el deporte y han demostrado que son iguales y mucho más capaces que sus colegas, el Nzalang masculino. Las estrellas más sobresalientes en estos años: Genoveva Ayongmana (capitana), Jade Boho, Dorin, Chinasa Okoro, Salomé Nke, las hermanas Salimata, Carolina, etc., lograron destacar y lograron abanderar a Guinea Ecuatorial por primera vez en el mundo a través del fútbol, gracias a su talento y dedicación.
En estos últimos años, también han surgido otras jugadoras que dan la talla, gracias al camino que hicieron las anteriores, eso ha permitido que un gran número de chicas se dedicasen a este deporte en el país. Sin embargo, parece que esa estrella se ha apagado de la noche a la mañana. Poco o nada se habla de ellas o se hace gran cosa para volver a levantar ese fútbol femenino que es el único que ha dado éxitos, hasta ahora, al país.
Hay de los que creen que la actual situación del Nzalang femenino se debe a que la Federación Ecuatoguineana de Fútbol presta toda su atención a la selección masculina, la cual está en auge después de su doble participación a la CAN Camerún 2021 y la reciente de Costa de Marfil 2023; mientras otros aseguran que la junta de la casa del futbol nacional no confía en el actual seleccionador, ya que de momento no puede fichar a uno expatriado por el caso de Jean Paul Mpila. En todo caso, acepciones que no justifican la lamentable situación actual del fútbol femenino en el país.
El proyecto Mamá Mangue sub 18 tampoco ha dado frutos, al menos hasta ahora. La Asociación de Futbol Femenino que se responsabilizó de llevar esa iniciativa recibió 180 millones, se ultimó en el turismo de la tecnificación y a penas se tiene una selección, pero sí, se informó que solo quedan alrededor de 11 millones XAF, simulando la justificación de los fondos con el ministro de Juventud y Deportes. La gran pregunta es: ¿dónde está el Nzalang Femenino? desde que empezó el 2024 no las hemos visto vestir la elástica de la Roja Nacional.
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